El cambio de estación suele desestabilizar nuestra energía y bienestar. La antigua sabiduría ayurvédica ofrece recomendaciones prácticas para preparar el cuerpo y la mente al llegar el otoño, buscando mantener el equilibrio de los doshas según nuestra constitución única.
Alimentación nutritiva y calentadora
La alimentación juega un rol clave para contrarrestar el frío exterior y nos prepare para los meses más helados. El otoño nos invita a consumir alimentos calientes y nutritivos que compensen la reducción de temperatura:
- Incrementa alimentos calentadores como la avena, el arroz integral, las lentejas, los garbanzos y las papas. Estos infunden vigor y energía al cuerpo.
- Incluye más verduras de raíz como la batata, zanahoria, rábano y remolacha, que fortalecen el sistema inmune y proveen antioxidantes.
- Agrega especias termogénicas a tus comidas como jengibre, pimienta negra, ají picante, comino y canela. Ayudan a estimular la digestión y calentar el cuerpo.
- Prepara lassi caliente de jengibre y cardamomo para activar el fuego digestivo de forma gentil.
- Toma infusiones y tés calientes con especias digestivas como el popular chai masala o el adrak chai.
- Reduce el consumo de alimentos y bebidas frías como los lácteos, ensaladas y los smoothies helados.
Rutinas para activar tu energía interior
Para contrarrestar la tendencia natural al letargo, cansancio y sensación de pesadez durante el otoño, incorpora hábitos que activen tu energía:
- Despierta y levántate temprano para aprovechar la luz solar mañanera. Realiza ejercicios activadores como saludos al sol, chi kung o caminatas rápidas respirando profundo.
- Toma un baño caliente al despertar y antes de acostarte, para potenciar la circulación sanguínea y limpieza linfática. Puedes agregar aceites esenciales energizantes como romero o limón.
- Realiza un automasaje vigorizante en todo el cuerpo con aceite caliente antes de darte una ducha, para estimular los sentidos y órganos internos.
- Exponte a los primeros rayos del sol mañanero y pasa tiempo al aire libre. Esto ayuda a regular los ritmos circadianos y subir el ánimo.
- Mantén una rutina regular de ejercicios, aunque disminuya levemente su intensidad. El movimiento es esencial aún en los días nublados y más fríos.
Cómo equilibrar los doshas en otoño
Cada dosha o principio biológico se comporta diferente en otoño. Es clave adaptar las rutinas para mantener el equilibrio:
Vata (aire-espacio) tiende a incrementarse. Para calmarlo, abrígate bien, hidrátate más, evita ejercicios extenuantes y los ambientes muy secos. Prioriza calidez interna y externa.
Pitta (fuego-agua) disminuye naturalmente. Ayúdalo limitando alimentos picantes, disminuyendo actividad física intensa y exposición prolongada al sol. Evita acumular ira o frustración.
Kapha (agua-tierra) aumenta en esta época. Para contrarrestar, incrementa actividad física y reduce horas de sueño. Evita alimentos muy pesados o dulces. Favorece ligereza.
Cuida tu rutina de sueño
Para un sueño más reparador durante los meses más fríos y con menos luz solar:
- Acuéstate y despierta temprano para aprovechar mejor la luz del día. Evita permanecer en cama después de despertar.
- Establece una rutina pacificadora antes de dormir, como darte un baño caliente, leer y meditar.
- Aplica aceites esenciales relajantes como lavanda sobre los pies y en las sienes antes de acostarte.
- Toma una taza de té caliente de hierbas para dormir como manzanilla, pasiflora, valeriana o flor de azahar.
- Usa ropa de cama apropiada y calcetines para mantener los pies abrigados.
Implementando sencillos cambios en tu rutina siguiendo los principios ayurvédicos, podrás transitar el otoño de forma armoniosa, mantener el bienestar y preparar tu cuerpo para el invierno.